Cómo hablan los ángeles

Cada ángel que se trabaja abre un espacio psíquico desconocido, las más de las veces, por el practicante. Este espacio lógicamente liberará contenidos que serán traducidos en conocimiento, virtudes, o sombra que emerge (aspectos deliberadamente negados en un momento de la vida). Es en un punto del trabajo dónde el practicante necesariamente se separa del “espacio psíquico liberado”, provocando artificialmente una dualidad interna que le permitirá conocer el material nuevo que se integrará a la totalidad de la conciencia, y en este punto es un esquizofrénico que “personifica” el material nuevo siendo de esta manera capaz de dialogar con él, a fin de ver las tensiones entre lo nuevo y lo viejo.Es por esto que lo enochiano, y muchas técnicas mágickas de invocación o evocación, presentan un formato particularmente fantástico: el mago que dialoga con seres de otros planos, y que incluso es capaz de verlos tanto con su visión interna como a través de sus ojos físicos (como lo es el caso de la evocación). Este formato fantástico es precisamente un formato necesario, que no indica necesariamente que el mago se esté vinculando con “un ser” externo. De hecho muchos creen que lo hacen, cuando en realidad se están vinculando con “personajes” desconocidos de sí mismo y a punto de ser integrados a la conciencia, o detonados en virtudes y “poderes”.Es por esto que cuando se dice que el mago obtiene conocimiento de otras esferas es algo cierto. Pero vale aclarar: de otras esferas de sí mismo.Nosotros tenemos tres maneras básicas de conocernos:

1. por el reflejo de nuestro entorno que funciona a modo de espejo;
2. por el pensamiento común que con sus fórmulas sirve como aparato de descubrimiento de sí;
3. por el pensamiento especializado: psicologías de todo tipo que tienen un discurso específico dentro de su campo que también funciona como herramienta de investigación.Estas son las básicas, ahora, existe una cuarta: la cuál es propiedad de inspirados, artistas de todas las épocas, magos y poétas.
Esta manera de conocer es por insight, surgimiento múltiple de ideas en diversos lugares del planeta, o visiones que tiempo después son asimiladas por la acepción común a fin de enriquecer las tres maneras básicas de conocimiento de sí.Un mago enochiano es un “científico” que desarrolla la cuarta manera de conocer. Y no está mal decir que la magia enochiana es una herramienta de inspiración y una vía de acceso a la cuarta manera de conocerse a sí mismo.Ahora, si este es un sistema que nos permite hablar con ángeles y demonios, o si nos permite viajar a otros planos más sutiles de existencia nunca lo podría probar ni yo ni nadie. Lo que sí se puede probar, y esto lo demuestra la experiencia de los practicantes de este sistema, es el formato que impone su práctica, el cuál explicamos más arriba. Y en este nivel de desconocimiento, me parece útil pensar en no confundir formato con verdad. Si vemos la comunicación con los “ángeles” como un formato vamos a enriquecernos enormemente, y a cuidarnos en un ejercicio mental que no es fácil y en el que todos conocemos los riesgos de no manejarlo bajo una guía adecuada.Van a encontrar en el blog descripciones que tendrán el formato de diálogo con una energía determinada. Espero que esto se entienda como un formato y no como una canalización, o diversos términos “new ager” que no sirven sino más que para alejarnos de nosotros mismos. Entiendo que muchos consideran que dialogan con un montón de seres, incluso que estos seres le rinden homenajes constantes. Me parece que detrás de ello sólo hay un ego fisurado que está ávido de reconocimiento y autoimportancia. No es nuestra postura fortalecer el ego y pensar que podemos ser superman, sino obtener de nosotros mismos un mayor y legítimo conocimiento en el ejercicio de la magia enochiana. En todo caso, quién posee verdadero conocimiento no tiene por preocupación la seguridad o inseguridades de la personalidad.

Rafael Barrio.

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